Me fue inevitable escribir antes de regreso a casa luego de mostrarme sorprendido en la oficina, frente al computador, y que mis compañeros de trabajo se echaran a reír por una serie de comentarios que hice. Incluso no contuve lagrimear, es que tengo ese «defecto» de sorprenderme con los ojos aguados.
Sin lugar a dudas, el nuevo trailer del Guasón me ha causado una serie de sensaciones encontradas, porque precisamente ayer me cuestionaba si en DC ya se habían acabado esas historias lúgubres o adultas, de esas que te dejan pensando si estuvo bien o mal, cuando hoy nos muestran lo que sería una completa obra de arte del género y es un colapso total en nuestra percepción sobre cómo debemos concebir a los personajes de las historietas.
A pesar de eso, valga la aclaración, esta película un tanto noir no tiene nada que ver con el universo extendido de DC, es un filme independiente, cargado de gran impacto artístico y una fotografía fantástica, unos planos tan grandes como la historia del personaje.
Por lo que muestra el avance, seguramente dará mucho de qué hablar con esta historia de un hombre bueno que una sociedad llena de anarquía lleva al borde de la locura, algo así como la versión de Killing Joke en pantalla grande.
Seguramente no gustará a todos, será criticada por el fan que consume cine de súper héroes con imágenes y secuencias fantásticas, tal vez por lo acostumbrados que nos tienen las grandes franquicias a filmes de crispetas y gaseosas para pasar el rato, pero mi mente no para de compararla con cintas como Taxi Driver de Martin Scorsese (de hecho sale Robert De Niro como el dueño del circo(?)). O para no ir tan lejos, la fotografía y planos no se alejan a los de la trilogía de Batman de Christopher Nolan y Watchmen de Zack Snyder.
El primer trailer ha dado un fuerte golpe en la mesa, un ruido que sin tantas pretensiones manifiesta la necesidad de que el amante del cine tenga que verla.
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